jueves, 28 de junio de 2012

INSTITUCIONES MEDIAVALES VALENCIANAS - EL JUSTICIA DE VALENCIA



Autor: José Guillén Milla

Una de las principales instituciones medievales valencianas que fueron creadas a raíz de la conquista del Reino Moro de Valencia por el Rey Jaime I El Conquistador en 1238, fue  la del Justicia de Valencia, autoridad que tenía sobre sí la misión inicial de impartir la justicia sobre causas comunes y criminales, asumiendo además, posteriormente, la funciones de un registro público de documentos.
Las diferentes subdivisiones que fueron creadas  por los distintos reyes valencianos a lo largo de los años, fueron las del Justicia para las causas de 30 sueldos, cuantía elevada en 1351 a 50 sueldos y posteriormente a 300 sueldos, ésta última subdivisión otorgada por privilegio de Pedro II de Valencia, El Ceremonioso.
Según el Privilegio de 21 de mayo de 1239, Jaime I instituye que un ciudadano debía ejercer en la jurisdicción ordinaria de la Ciudad de Valencia con la denominación de “Curia” estableciendo que: “Un solo vecino y habitante de la Ciudad de Valencia, sea “curia” de la Ciudad de Valencia y de todo su término y que él sólo oiga y determine las causas civiles, con el consejo de los Prohombres de la Ciudad, y todas las causas civiles y criminales sean examinadas por dicho juez o por su delegado, y no por ningún otro” (1)
El cargo tenía una duración improrrogable de un año y la misma persona no podía ser reelegido hasta transcurridos dos años de su cese, siendo el día de la Navidad el elegido para el juramento de su cargo y recibido por el Bayle General del Reino, representante del monarca y en su nombre. Son los Jurados y hombres probos de la ciudad los que confeccionan una terna para ser presentada al soberano que decide el idóneo para el cargo.
El funcionamiento de esta institución se prolonga durante casi cinco siglos y su final lo marca el ascenso al trono de España de la dinastía francesa de los borbones, mediante su primer rey Felipe V y la instauración del Decreto de Nueva Planta, que elimina todas las instituciones medievales creadas por los diferentes reyes valencianos desde la casa de Aragón a la casa de los Austrias.
Las principales fuentes de información que de esta institución conocemos, se encuentran en Archivo del Reino de Valencia con las diferentes secciones: Civil y Criminal y sus subdivisiones de 30, 50 y 300 sueldos, baremo que entendían según las cuantías de las reclamaciones de justicia que se presentaban.
Posteriormente, tomaron especial importancia,  los registros de documentos en los diferentes “Llibres de Cort” diversificándose a medida que las necesidades y la variedad de los asuntos lo exigían.
Las series del Justicia Civil, que reflejan la enorme actividad desplegada, son:
CADIRA Y PENYORES: Libros donde se iban apuntando los objetos que guardaba el Justicia Civil en prenda hasta el día en que se procedía a subasta judicial.

CONDENACIONES Y OBLIGACIONES: Aparecen juntas en los mismos libros. Las “condenaciones” son disposiciones dictadas por dicho magistrado en las que se condena al pago de las deudas dentro de un plazo de tiempo; y las “obligaciones” son el compromiso que contrae el condenado ante la justicia, ofreciendo sus bienes propios como garantía de su cumplimiento.
PROCURAS Y TUTELAS: Solicitud de nombramiento de curadores y concesión de los mismos si el Justicia juzgaba ser cosa justa.
DEPOSITOS: Se iban apuntando las cantidades de dinero que se dejaban en depósito en una “taula” especial que tenía el Justicia Civil, durante el lapso de tiempo en que se resolvía el pleito.
JUDICIARIO: En ellos el Justicia, a través de su asesor, va anotando las soluciones que se dan a los casos de poca importancia, y también se van registrando los trámites previos de los procesos.
CARTAS: Registro de las cartas y documentación epistolar recibida por los Justicias sobre asuntos de su jurisdicción. Hay incluso abundantes cartas reales en los registros más antiguos.
MANDAMIENTOS EJECUTORIOS: Registro de las órdenes del Justicia para la satisfacción de las deudas en los plazos fijados por los Fueros.
PETICIONES: También conocidas como “demandas “. Es la documentación judicial por excelencia. Comienzan con una solicitud pidiendo la condena de la parte contraria,  por los motivos que se aducen y terminan con la sentencia del Justicia.
PROCESOS: Copias independendientes de las diversas partes de los procedimientos seguidos en el proceso, con inclusión de la sentencia del Justicia, y que se comunicaba a los interesados, quedando también copia en los archivos de dicho funcionario.
RAZONES: Alegaciones contra las disposiciones judiciales del Justicia Civil.
REQUISICIONES: Solicitudes pidiendo la intervención del Justicia en un asunto.
VENTAS: También conocidas con el nombre de “ofertas”. Son los libros registro de los bienes que se iban a poner en venta judicial cuando un condenado no podía pagar a los acreedores la cantidad fijada en la sentencia.
MANAMENTS Y EMPARES: Hemos dejado para el final esta serie, una de las más importantes y abundantes producidas por el Justicia Civil de Valencia. Además, de la de todas ellas es la que sigue siendo consultada con mayor asiduidad por los investigadores y la que más ha evolucionado,  pues si en un principio (siglo XIII) su contenido respondía a su título –Mandamientos y Embargos- también se anotaban en ellas otro tipo de documentos jurídicos: contumacias, juramentos, obligaciones, fianzas, que mas tarde formarían series independientes, desgajándose de ellas. Pero además, y esto ya toca directamente a nuestro tema, se implantó la costumbre de “que los particulares hagan registros en estos volúmenes gran cantidad de documentos de diversas clases, antiguos y coetáneos, para su constancia legal,  hasta el punto que desde comienzos del siglo XVII dejan de consignarse en ellos los tipos iniciales de documentación, subsistiendo, en cambio,  el nombre tradicional de la serie”. De esta forma dicha serie alcanzará el carácter de un auténtico Registro Público de Valencia, donde los particulares acuden libremente a registrar sus  documentos, con el fin de dejar constancia de ciertos derechos suyos, por si en el futuro se pusieran en duda o alguien no quisiera obrar conforme a su contenido. (1)
Centrándonos en este último “Libro de Cort” podemos compararlo con los actuales Registros de la Propiedad y Mercantiles, así como también con los registros de los protocolos notariales, especialmente los relativos a los poderes que los ciudadanos, para la gestión de sus asuntos personales, nombran a  diferentes representantes, además de los títulos de propiedad de sus bienes materiales.
Desde la creación de la institución del Real Justicia, la redacción de los distintos documentos, sentencias, órdenes, actas y todo lo relacionado con su funcionamiento, se reflejaba en romance valenciano, precursor de la actual lengua valenciana,  que se siguió utilizando hasta la promulgación del Decreto de Nueva Planta, en 1707, que pasaron a registrarse en castellano y latín.
La Guerra de Sucesión por la que los valencianos perdimos nuestros Fueros y privilegios, produjo una fuerte emigración a distintos países europeos de parte de la nobleza valenciana, que estaba al lado del Archiduque Carlos de Austria y en contra de la monarquía borbónica. Precisamente estos nobles nombraban como sus representantes o apoderados a personas de su confianza en Valencia para cuidar de la administración de sus bienes. Dichos documentos, que venían escritos en valenciano, debían ser traducidos al castellano o latín a su llegada a Valencia para su posterior registro. Dada la frecuencia y cantidad de estos poderes que llegaban en valenciano, pronto se mitigaría esta medida y se reconocería junto con el castellano y el latín  “la lengua valenciana”, así como el italiano, como lenguas oficiales de los diferentes registros protocolarios.
  
 (1)  El Justicia Civil de Valencia. Manuela Fernández Arroyo y Jesús Villalmanzo, 1976.

A LOS 600 AÑOS DEL COMPROMISO DE CASPE



Autor: Miquel Carbonell Roig
Junio de 2012

Los pasados  9 y 10 de junio en el V encuentro de las Entidades de la Antigua Corona de Aragón C.E.A.C.A. “Los tres Reinos”, nos juntamos en Caspe, para  rememorar el Compromiso  que hace 600 años se acordó en dicha población, manifestar nuestra voluntad de seguir manteniendo nuestras peculiaridades propias de autoctonía, diferenciabilidad  e independencia, en las comunidades de Aragón, Mallorca y Valencia que aquel entonces eran  reinos independientes unos de otros con Fueros propios, Cortes y Parlamentos al igual que el condado de Barcelona con sus Usages y Costumbres.
En la Corona de Aragón, conformada por los reinos de Aragón, Mallorca y Valencia, condados como el de Barcelona, algunos ducados, señoríos; en fin, a montón de territorios; al morir sin descendencia el rey Martín el Humano, se quedaron sin rey, produciéndose “el Interregno”, que es el espacio de tiempo en que los reyes-estados o territorios dependientes de la Corona, no tenían soberano.
El Compromiso fue la determinación jurídica de a quién de los distintos aspirantes a la Corona, le correspondía el derecho de herencia de los distintos reinos y territorios que la conformaban.
Situándonos de nuevo en la actualidad, nada más llegar a Caspe, nos incorporamos de lleno a la conferencia que sobre “La formación de Aragón a través de sus lenguas”  estaba impartiendo el Presidente de Amigos de Tamarite y Vicepresidente de FACAO.
A continuación se inauguró oficialmente el Encuentro por las autoridades y seguidamente, todos juntos, celebramos la comida de hermandad.
Por la tarde, después de la elaboración de conclusiones por los representantes de las entidades allí reunidas, y escuchar la disertación de nuestro Josue Ferrer sobre: presentación de webs, participamos de la mesa redonda de debate sobre “La antigua Corona de Aragón, lenguas e identidades”.
Dignas de reseñar fueron la decididas e innovadoras posturas, tanto por los ponentes aragoneses como de los baleares, de conseguir: en primer lugar, el reconocimiento oficial en sus respectivos estatutos, de sus lenguas: aragonesa y baleáricas (mallorquín, menorquín e ibicenco) y en segunda lugar, el de defender la incorporación a la escritura de sus respectivas lenguas, de las hablas autóctonas conservadas y enseñadas por sus padres y pueblos correspondientes, en contra de ese catalán inventado que pretenden imponerles tanto desde los poderes políticos y facticos del pancatalanismo, como por los políticos de sus respectivas autonomías.
De los once ponentes, sin menospreciar a ninguno de ellos, quisiera resaltar: Primero, al investigador mallorquín Mikel Garau, que nos contó como creó la “Academia de Sa Llengo Balea” y como ha conseguido introducir en los congresos internacionales de romanística, la incorporación de la lengua balear.
En segundo lugar, a nuestro investigador Pep Guillén, que aconsejó a  los presentes que no se fiaran de los políticos y menos de los del PP., a los que tanto los aragoneses como a los baleáricos les habían prometido la recuperación de sus lenguas,  comentándoles lo que nos pasó a los valencianos, que a pesar de las multitudinarias manifestaciones realizadas por el pueblo valenciano a lo largo de los tiempos, los políticos en general y los del PP. en particular, nos han traicionado siempre, engañándonos con la creación  de esa Academia de una lengua sin nombre, que pactó Zaplana con Pujolini para institucionalizar el catalán bajo el nombre de valenciano.
Por último, a nuestra catedrática y filóloga Teresa Puerto, que en maravillosa conferencia en power  point, nos contó como en los congresos internacionales en los que participa, tiró por tierra los falsos argumentos del pancatalanismo respecto a la lengua valenciana. Aprovechando que estábamos en Caspe proyectó la reproducción de una parte del acta sobre el Compromiso, conservada en el obispado de Segorbe, en la que se constataba que estaba hecha en lengua valenciana y ¡como los de siempre!, habían  intentado pasar por alto o suprimir lo de lengua valenciana, como han venido haciendo a lo largo de los tiempos en multitud de documentos.
El sábado se remató presentando el I Corrector Ortográfico del Aragonés Oriental.
Al  día siguiente domingo, después de la visita guiada a la Colegiata de Santa María del siglo XII donde se firmó el compromiso y existe la reliquia de la Cruz de Jesucristo, vimos la ermita, el barrio medieval  judío y finalmente escuchamos la conferencia que sobre el Compromiso nos dio el paleógrafo José M. Arcal. Este se limitó a comentar lo transcrito en las actas, que de momento no había visto en ningún libro que habla sobre el tema y es el hecho, de que las actas fueron firmadas y escritas tanto  por parte de los compromisarios catalanes como de los valencianos  en lengua valenciana y por parte de los compromisarios aragoneses en aragonés, lo que demuestra que en aquel entonces, las únicas lenguas oficiales reconocidas en la Corona de Aragón y por tanto en el mundo civilizado, eran  aquellas en las que se habían escrito y firmado las actas, o sea: el valenciano y el aragonés y por tanto, el catalán no tenía la importancia jurídica, política ni cultural, que pretende hoy en día, pasados 600 años, el nazi-onalismo pancatalanista.
Ha sido bonito apreciar en la semblanza de nuestras respectivas lenguas, las diferencias existentes y es que el espacio del tiempo, la distancia entre los lugares y la falta de intercomunicación, nos  ha llevado a cada una de estas comunidades, a mostrar nuestras diferencias, nuestras características; en fin, nuestra cultura y nuestra forma de representarla en nuestras respectivas lenguas, que siendo hermanas, son diferentes.



lunes, 25 de junio de 2012

LEY DE LENGUAS DE ARAGON



BERRINCHE DE LA PRENSA CATALANA POR LA LEY DE LENGUAS DE ARAGÓN

PILAR RAHOLA LLAMA “TRAIDORA” Y DE “MALA FE”A LA CONSEJERA DE CULTURA DE ARAGÓN POR DEFENDER EL ARAGONÉS DE LA ZONA ORIENTAL

TILDAN AL ARAGÓN ORIENTAL DE VAGÓN DESCARRILADO DE LOS PAÍSES CATALANES

La Plataforma Aragonesa No Hablamos Catalán denuncia que la prensa catalana y los partidos nacionalistas catalanes han iniciado una campaña de insultos contra Aragón y sus instituciones después de que la DGA presentara públicamente el borrador de la Ley de Lenguas en el que se apuesta por defender y promocionar la lengua aragonesa propia de la zona septentrional y de la lengua aragonesa propia de la zona oriental, tal y como manda el Estatuto de Autonomía. El Diario El PuntAvui recurre incluso a Guifredo el Velloso al que le dan categoría de “padre de la nación catalana” y queel nacionalismo catalán encumbra como el creador de la bandera de las cuatro barras. ERC vuelve a exigir la independencia de la “nación de los Países Catalanes que va desde Salsas a Guardamar y desde Fraga hasta Mahón”.

Después de que el Gobierno de Aragón haya anunciado algunos cambios en la Ley de Lenguas, tal y como prometieron PP y PAR durante la Campaña Electoral, los nacionalistas catalanes y la prensa de la comunidad vecina han insultado irracionalmente y hasta la saciedad durante toda esta semana a las instituciones aragoneses así como al conjunto de Aragón.

La polifacética Pilar Rahola ha llamado “traidora”, “botiflera”y “Agustina de Aragón de pacotilla” a la Consejera de Cultura del Gobierno de Aragón y afirmado, hablando de Dolores Serrat, que “no hay nada peor que una persona que para ser aceptada, necesita traicionar sus orígenes. Es decir, la identidad de su gente durante generaciones. Y como todo traidor, necesita ser más papista que el papa, tanto, que incluso niega haber nacido en Catalunya sino “en la provincia de Gerona”, término más digerible para sus colegas hooligans de la España grande y libre”.

Rahola continúa diciendo que “la tal Dolores, pues, merece el título de botiflera del año, aquel mote que los catalanes dedicaban a los seguidores de Felipe V y que ella se ha ganado con inquina, dedicación y mala fe”. Finalmente Rahola se pregunta “¿Qué más le queda a España por hacernos? ¿O cuánto más aguantaremos nosotros?”

ERC, por su parte, ha presentado una moción en el Ayuntamiento de Ripoll para reprobar a Dolroes Serrat. El diario El PuntAvui ha realizado una encuesta por Ripoll, ciudad de origen de la Consejera Serrat, y afirma en sus páginas que “muchos de los consultados se mostraban contrariados y en algunos casos dolidos y afirmaban que no le había servido de nada haber nacido en una villa que tiene el título de Cuna de Cataluña y que, en el monasterio de Santa María, está enterrado el creador de la nación catalana, Guifredo el Peloso. Los más airados, incluso, llegaron a proponer que el pleno la declare persona no grata, tal como hizo hace poco con el rey de España”.http://www.elpuntavui.cat/ma/article/3-politica/17-politica/553021-astorament-al-bressol.html

Antoni Puigverd, en el diario La Vanguardia, señala que En España, desde hace siglos, los ciudadanos de familias de matriz castellana tienden a considerar insoportable la mera existencia de otra lengua que no sea la propia, pues, durante siglos, en todos los regímenes, con mayor o menor descaro, se ha transmitido la idea de que sólo existe en España una lengua digna de tal nombre, que es la española por antonomasia”.

Pero Puigverd no se queda en eso solo, se remonta al franquismo al informar que “… En ella, Laín explica que uno de los objetivos, si no el mayor, del alzamiento de Franco era acabar con la cultura catalana. Sobre el intento casi logrado de genocidio cultural, la España democrática e intelectual no ha hecho la menor autocrítica. Al contrario, en un abuso argumental indigno del que lo usa, se ha repetido mil veces que la ley de inmersión escolar (discutible, pero democrática) equivale al genocidio cultural que ensayó Franco”. 

A la fiesta se suma también Josep Lluís Carod-Rovira, quien afirma que “el gobierno aragonés contra la lengua propia de la Franja que nosotros llamamos de Ponent, porque la tenemos en poniente, i ellos oriental, porque ellos la tienen en su oriente. Ningún problema, pues, de geografía. Pero sí de lengua”. Continúa Caod-Rovira diciendo que “la (i)rresponsable de hacer pública esta decisión militar de Defensa, sino la de Cultura (¿): Dolores Serrat, apellido claramente sueco, como puede verse, nacida y vivida en Ripoll, en el Aragón oriental, hasta los 18 años”.

Carod-Rovira va más lejos y reivindica la nación catalana de Salsas a Guardamar y de Fraga hasta Mahón: “el anterior gobierno socialista no lo hizo oficial (el catalán), como tampoco el aragonés, sino que, simplemente, reconoció legalmente que existían como lenguas, en el territorio de administración aragonesa,cosa que no dejaba de ser histórico. ¿Continuaremos inmóviles en el Principado y en el resto de los Países Catalanes, universidades, entidades, ciudadanos y ciudadanas? El recurso a la “injerencia” me recuerda la no intervención de los países democráticos de Europa y del mundo, ante la ofensiva armada del general Franco, broma que nos duró 40 años…”.

Para ramatar, en el diario Nació digital apuestan definitivamente por la independencia de los Países Catalanes de España, incluyendo el Aragón oriental. El historiador Jordi Casals hace un artículo titulado “Los vagones descarrilados de los Países Catalanes”. Afirma que “las tesis independentistas son cada vez más populares en la mayoría ciudadana de nuestro país. Paralelamente a este in crescendo independentista en el Principado, la derecha española ha emprendido una ofensiva en el resto de territorios de los Países Catalanes que forman parte del Estado español contra la lengua catalana.

“Lo que ya es un echo es que la España gubernamental está haciendo descarrilar los vagones de las Islas (Baleares), el País Valenciano (Comunidad Valenciana) y la Franja. Este ataque es posible por la falta de músculo político nacional en el marco de los Países Catalanes como tal. Cuando oímos a Duran i Lleida y algunos políticos blasfemar de la nación catalana de Salsas a Guardamar y de Fraga a Mahón, nos hacemos cruces de su falta de miras nacionales. Solo el acomplejamiento del bienestante catalanismo político del Principado, que cierra los ojos ante las injusticias y agresiones hacia el resto de los Países Catalanes, ha hecho posible que esta ofensiva españolista sea posible”.

Ante todas estas barbaridades, la Plataforma Aragonesa No Hablamos Catalán quiere denunciar públicamente la campaña antiaragonesa que se está haciendo desde Cataluña. María José Blanc, portavoz de la Plataforma, señala que “es una pena que desde los medios de comunicación de Cataluña y desde los partidos nacionalistas catalanes se fomente el insulto y el odio hacia Aragón cuando aquí lo único que queremos es trabajar y legislar a favor de nuestro aragonés. Los pancatalanistas nos acusan de acientíficos mientras en sus universidades se enseñan los reyes catalanes, la Confederación catalanoaragonesa y la nación de los Países Catalanes. Es más, desde la prensa catalana esta semana le han dado validez al origen de la bandera aragonesa en Guifredo el Peloso y la leyenda de los dedos manchados en sangre”.

La Plataforma lamenta este odio antiaragonéssin argumentos que se está generando en Cataluña y afirma que seguirá defendiendo la lengua aragonesa y que trabajará por el retorno de los bienes sacros retenidos en Lérida. Finalmente, la Plataforma lamenta que desde Cataluña traten a Aragón como una colonia y que les quieran imponer el catalán mientras que les niegan devolver sus bienes artísticos religiosos de las parroquias orientales y les ponen problemas desde hace dos años para atenderlos en los hospitales leridanos.





sábado, 23 de junio de 2012

HISTORIA Y FUNDACION DE VALENCIA Y SU REINO (y VIII)




Febrero 20, 2008
Extraido de Wikipedia.

En 1957, la Gran riada de Valencia tuvo graves consecuencias económicas para la ciudad y su huerta y obligó a desviar el cauce del Turia para prevenir futuras inundaciones, lo cual dotó a la urbe de un gran espacio verde central en el antiguo cauce. Posteriormente y ya en la etapa siguiente se constituirá el proyecto actual.
Fernando Martínez Castellano fue el primer alcalde de Valencia al inicio de la etapa democrática.
En 1979 Ricard Pérez Casado, es investido como alcalde de la ciudad , desarrolla el primer Plan General de Ordenación Urbana, inicia las obras del parque del viejo cauce y construye el Palau de la Música. En los años 80 comenzó la construcción del Metro de Valencia del que hay cuatro líneas y continúa todavía en expansión.
Durante el golpe que tuvo lugar el 23 de febrero de 1981 el capitán general Milans del Bosch toma la ciudad de Valencia con la compañía de carros de combate perteneciente al batallón de infantería Vizcaya 21 con base en Bétera.
Posteriormente la ciudad pasará a ser la capital administrativa de la Comunidad Autónoma Valenciana, constituida formalmente en 1982.
Notas
La VALENCIA MÁGICA (I)
Desde una concepción filosófica de la vida, la magia es algo que impregna constantemente nuestra existencia. Esa actitud llevada a la práctica permite al ser humano ver en cada cosa, en cada lugar, un aspecto mágico que podría pasar desapercibido cuando nos acostumbramos a verlo todo de un modo profano.En este caso, hablar de la Valencia mágica nos llevará a recordar algunas de sus tradiciones, acontecimientos y hechos que llevan, indudablemente, el sello de lo prodigioso, lo mistérico o simplemente lo legendario, pues de todo encontramos en la historia de esta tierra.Valencia vive a orillas de un mar tranquilo y sosegado, sensación que transmite al espíritu del valenciano. Un mar que nos trae en su brisa mensajera un agradable olor a yodo y sal, pero también el olor de la Historia, de la tradición, de la cultura, de antiguas civilizaciones que lo surcaron con sus barcos y que no dudaron en asentarse en tan bellos y fecundos parajes.
Un mar amenazado hoy, como tantas otras cosas, por la ignorancia y la barbarie del hombre de este siglo **; un mar que antaño era orgullo y señal de hermandad entre muy distintos pueblos alejados físicamente por miles de kilómetros; por ello se le llamó el Mare Nostrum, «nuestro mar». Jamás el nombre de un mar fue tan sencillo y a la vez cargado de un sentido tan fraternal.Este mar sirvió, como si de un gigantesco puente de agua se tratase, para unir civilizaciones a lo largo de muchos siglos. Antes de que las potentes naves del Imperio Romano surcaran sus aguas, lo hicieron los griegos, y anteriormente los fenicios, experimentados navegantes.Los primeros pobladores conocidos de estas tierras fueron los iberos, en concreto los llamados edetanos que, indómitos y toscos, independientes y guerreando entre sí, fueron encontrados por los industriosos fenicios que llegaron a nuestras costas hace unos 3500 años, si bien nos resulta difícil determinar las poblaciones a las que dieron origen.Más conocidas y famosas fueron las fundaciones griegas que, mucho tiempo después (800 años aproximadamente), encontramos en nuestro litoral. Una de ellas, enclavada en el cabo geográfico que separa los dos golfos levantinos, fue denominada Artemisión, en honor a la Diosa Artemisa (la Luna, lo femenino), cuyo culto introdujeron en nuestra península. Los romanos, que llamaban a esta Diosa Diana, denominaron a dicho lugar Dianium, y de ahí su actual nombre de Denia, donde todavía podemos ver los antiquísimos restos de esta formidable atalaya.
También fueron solar estas tierras de ciudades llamadas a hacer Historia, tanto dentro como fuera de nuestra península. Cuentan historiadores y poetas que Hércules, al atravesar lo que hoy llamamos España, perdió en ella a su compañero Zacynto, y que en el lugar donde le dio sepultura consagró una ciudad, la cual tomó su nombre; esa ciudad era Sagunto. Pero hubo un Hércules egipcio, uno fenicio y otro griego, ¿cuál de estos pueblos, representado por el famoso semidiós, construyó las murallas de Sagunto? Hoy es opinión general entre los arqueólogos que su primitiva fundación se remonta a tiempos pre-históricos o, por lo menos, a aquellos remo-tísimos y oscuros en los que muchos pueblos co-nocidos levantaban construcciones ciclópeas o pelásgicas, de las que aún quedan restos en Sagunto.Algunos creen que la ciudad toma su nombre de navegantes y mercaderes griegos provenientes de la isla de Zacyntio. Según Tito Livio, gentes del Lacio vinieron a poblar la ciudad. De ser así, las estirpes más ilustres de la Antigüedad infundieron su genio y su cultura en aquella vetusta ciudad que, asentada a orillas del mar, acogía en su seno las naves extranjeras, mirando alegre al sol de levante, como buscando en sus primeros rayos la luz de la civilización que resplandeció en Egipto y Fenicia primero, en Grecia y Roma después.Fue esta última la que levantó el teatro que hoy despierta tantas controversias por su reconstrucción, teatro que nos encandila en las noches mediterráneas con su mágica belleza y nos evoca otros tiempos en los que trataba de enseñar profundas verdades a los hombres.En el inicio de las guerras púnicas, Aníbal cerca la ciudad, y tras una heroica defensa, ésta es destruida. Después del sitio de Troya no hubo otro más nombrado en la Antigüedad que el de Sagunto. Tito Livio cinceló sus hazañas en el bronce de la Historia, inmortalizándolas para que sirvieran de eterno ejemplo de lealtad y constancia.Fue este mismo historiador el que hizo aparecer Valencia en la Historia por primera vez, cuando menciona que corría el año 615 de la fundación de Roma (138 a.C.), y siendo cónsul en Hispania Junio Bruto, éste otorga a los que lucharon «bajo Viriato» las tierras cuyo nombre era Valencia. Esas dos palabras entrecomilladas hicieron correr ríos de tinta en dos direcciones bien distintas: unos pedían un origen lusitano o ibero para nuestra ciudad, otros defendían un origen romano.La Historia parece haber dado la razón a estos últimos, pues los más recientes descubrimientos arqueológicos practicados en la ciudad nos hablan del desenterramiento de las termas más antiguas de nuestra península (cerca de 100 años a.C.). Por los apellidos encontrados en distintas inscripciones sabemos, incluso, que los romanos que fundaron la ciudad provenían mayormente de Nápoles y Pompeya.
S obre el origen del nombre de la ciudad circulan distintas leyendas y versiones. Unos aseguran que Romo, vigésimo rey de Iberia, fundó la ciudad a la que se denominó Roma. Y entonces sucedió algo muy curioso. Cuenta la Historia que cuando los hombres que habían partido de Troya junto con Eneas, huyendo de la matanza y la destrucción, llegan al Monte Palatino, encuentran una ciudad que los latinos llamaban Valentia. Los troyanos traducen este vocablo a su idioma como sinónimo de fuerza y de valor y llaman a la ciudad Roma. Más de seis siglos después, unos romanos llegan a una ciudad a la que algunos llamaban Roma; ellos traducen este vocablo a su lengua y la llamarán Valentia, nuestra Valencia, quedando de este modo tan curioso unidas por su nombre y origen ambas ciudades.
Los romanos levantaron sus centros mágicos en lo que hoy se considera el centro histórico de la ciudad. Los templos a Diana y a Esculapio ocupaban lugares preferentes. Dichos lugares servirán para el posterior asiento de la Mezquita en época musulmana; los cristianos levantarán su Basílica a la Virgen sobre el Templo de Diana, la Diosa Virgen de los romanos, asociada con la Luna y los Misterios Femeninos; sobre el Templo de Esculapio se alzará la Catedral.
Así nació a la Historia Valencia, que tras el derrumbe del mundo romano y de un corto período visigótico, fue poblada por los cultos y laboriosos musulmanes que, en una época de gran esplendor, convirtieron la ciudad en uno de los más bellos jardines de su tiempo. Perfeccionaron los canales de riego y crearon un tribunal de corte oriental que todavía funciona después de más de mil años de existencia: el Tribunal de las Aguas, cuyos juicios son orales y sus sentencias reconocidas como legales, recordándonos esa época de oro donde la palabra de un hombre era suficiente.
Aparte del arroz, que ha hecho tan famosa a Valencia, los pueblos árabes traen sus grandes conocimientos de Medicina, Astrología, Alquimia, Matemáticas y los secretos que conseguían en nuestra cerámica los reflejos metálicos que luego se perdieron, hasta que recientemente parece ser que se ha vuelto a encontrar la fórmula que los producía.
Llamaron Al-Buhera a un gran lago de 14.000 hectáreas de superficie que hoy han quedado reducidas a 400. De ahí el nombre de Albufera que significa, justamente, lago. Y los Jardines de Ruzafa eran uno de los lugares más deliciosos de España

CRONICAS DE MUNTANER




Emitido por Julián Naval
Redactado en lengua aragonesa

Lo majordom ana a la dona muller del rey, e amena la ab huna donzella e ab dos cavallers, e mes la en la cambra del rey, e aqui ell la lexa. E la dona despullas, e mes se al llit del rey, e feu apagar tota la llum.
Quant lo rey hac sopat, e tots los cavallers s'en foren anats, lo rey s'en entra en huna cambra que era apres de aquella hon dormia, e aqui ell se despulla es descalsa, e puix, abrigat ab son mantell, en camisa, ell s'en entra en aquella cambra hon la dona sa muller era colgada. E lo rey colgas ab ella sens llum, que no y havia. El rey cuydas que fos aquella dona ab la qual havia empres que vengues a ell. Veus quel rey mena son solaç ab la dona sa muller; e ella no parla gint, per tal,  que no la reconegues tro que hagues jagut ab ella. E aquella s'emprenya de hun fill. La dona era molt savia e certa; e sempre conech que era prenys, e descobris al rey.
«Senyor, dix ella, prech vos que no us sia greu, si aquesta nit vos he amblada; que certes no u he fet per nenguna malvestat ne per nengun malvat desig que yo hagues; mas per tal que de vos e de mi ixques fruyt que plagues a Deu e que fos hereu de nostra terra e de nostre regne. E sapiats per veritat que, segons que yo creu, yom so feta prenys en aquesta hora. E fets scrivre la nit e la hora, que axi u trobarets».
Quant lo rey entes que ella era la dona sa muller, tenchse per sobre-pres; mas non feu semblant; e feu de belles paraules ab la dona, entro al mati. E al mati llevaren se e stigueren ensemps aquell jorn, e puix lo rey cavalha e anassen en Catalunya. E la dona engruxa, e stech tant en aquell castell fins que hac hun fill que hac nom Jaume.

MISTERIOR DE LA HISTORIA (XI)



Por: Ricardo de la Cierva
Editorial  Planeta

Segunda edición: febrero 1991

 III.             CATALUÑA: MUCHO MAS QUE UN MILENIO

 CATALUÑA EN LA SEGUNDA FUNDACION DE ESPAÑA

 Cuando la primera de las nacionalidades históricas invade Europa al comenzar la Edad Moderna –Portugal, España, Inglaterra, Francia -, el pueblo de Cataluña prefiere fundar –cofundar- la nación española e integrarse en ella más que proyectar su personalidad innegable en un Estado nacional restringido y propio. (Ya comprenderemos, al tratar de la aparición del nacionalismo catalán a fines del siglo XIX, dentro de la resaca de una segunda oleada europea o de nacionalidades, como los términos nación catalana, o castellana, o aragonesa, se utilizaban sin escrúpulo en la Edad Moderna, como término de extranjería, en sentido regional o gentilicio, no como sinónimos de Estado-nación.)

Dejábamos  nuestro hilo histórico en Barcelona el 11 de septiembre de 1714, cuando el ejército borbónico de Felipe V incorpora al cap i casal de Cataluña –que ése es el título clave, y la cifra de la Ciudad Condal- a la obediencia de la nueva dinastía hispánica. ¡Como se acumulan las leyendas falsas de la propaganda histórica ultracatalanista sobre el admirable siglo XVIII catalán, tan ignorado y manipulado en la citada exposición de la Generalidad en Madrid, 1984! Hasta monumentos enciclopédicos tan acreditados –merecidísimamente- como el Diccionario básico Espasa (tomo II, p. 1197)  llegan los ecos básicos de esa propaganda. “Casanova, Rafael. Fue el último Conseller en cap. Se opuso a la entrada de las tropas de Felipe V en la Ciudad Condal y fue muerto en el baluarte de la Puerta Nueva.” Que va. Hasta el propio Espasa breve se traiciona, clarividentemente, a si mismo; porque la conquista borbónica de Barcelona sucedió el 11 de septiembre de 1714;  y el gran Diccionario da para la muerte de Rafael Casanova el año 1743. Y es que Casanova, el heroico defensor de una Barcelona numantina, no murió en el empeño. Logró ocultarse; se acogió después al perdón real. Y murió tranquilamente en San Baudilio de Llobregat,  casi treinta años mas tarde, tras ejercer sin traba alguna su profesión.
En enero de 1716 se dictó el decreto de Nueva Planta del gobierno de Cataluña. Se implantaba, evidentemente, una mayor uniformidad entre los antiguos reinos de España; pero el reformismo borbónico no hizo tabla rasa y respetó algunas importantes instituciones catalanas tanto en el derecho como en la organización de la convivencia. Vicens Vives expone, con su profundidad habitual, la cara y la cruz de la transformación. La cruz “Cataluña quedó convertida en campo de experimentos administrativos unificados: capitán general, audiencia, intendente, corregidores... La transformación fue tan violenta que durante quince años estuvo al borde de la ruina” (p. 144). Pero ésta es la cara de la reforma: “Luego resultó que el desescombro de privilegios y fueros benefició insospechadamente a Cataluña, no solo porque obligó a los catalanes a mirar hacia el porvenir, sino porque les brindó las mismas posibilidades que a Castilla en el seno de la común monarquía. En este periodo –aunque en realidad provenga de 1680- se difunde el calificativo de laborioso que durante siglo y medio fue tópico de ritual al referirse a los catalanes. Y, en efecto, se desarrolló entonces la cuarta gran etapa de la colonización agrícola del país, cuyo símbolo fue el viñedo... En cuanto a la industria, lo decisivo fue la introducción de las manufacturas algodoneras, financiadas por los capitales sobrantes de la explotación agrícola y el auge mercantil. Estos signos de revolución industrial, estimulados por la presencia de entidades rectoras, como la Junta de Comercio de Cataluña, se difunden por toda la periferia peninsular. Hacia 1760, las regiones del litoral superan a las del interior en población, recursos y nivel de vida” (Vicens, p. 145).

Los grandes Borbones del siglo XVIII reducen la obsesión europea, intensifican la conexión americana y consiguen así la plena consolidación de la nación española, la auténtica Segunda Fundación de España. Sin el menor problema político ni la menor exteriorización nostálgica por parte de  Cataluña, donde se genera, como demostrarán las formidables pruebas del siglo XIX, un profundísimo patriotismo español. Para esta Segunda Fundación de España, Cataluña, como había sucedido en la primera –desde fines del siglo XV-  desempeña un papel primordial. Vicens: “Este proceso de integración social entre los distintos pueblos de España, en el que los catalanes tomaron parte decisiva mediante una triple expansión demográfica, comercial y fabril, fue de mucha mayor enjundia que cualquier medida legislativa ideada desde la época de Felipe II” (p. 145). La apertura total de las Américas al comercio catalán por el rey Carlos III –aclamado como ningún otro rey de España en Barcelona desde su desembarco inaugural, cuando llegaba de Nápoles- originó un brote de colonias catalanas en América que defendieron hasta el último aliento, durante la guerra civil atlántica del siglo XI, la bandera de España. Esa bandera nueva que seleccionó el propio rey Carlos III como una concentración de los colores de Cataluña, y a partir de la enseña naval catalana.

EL MOTIU POLITIC DEL PANCATALANISME (II)



Colectiu Valldaura.
La Real Academia Espanyola front a la Llengua Valenciana.

D.- Valencia mai idiomaticament catalana.
"El nom de catalá aplicat al propi idioma 1’admeten de bon grat tots els rossellonesos, els eivissencs, i també els mallorquins cultes, pero els valencians generalment s'hi resistixen. Mallorca presenta alguns eixemples medievals de la introduccio del nom de catalá per a la Ilengua, pero Valencia no cap" (Sanchis Guarncr. M., "La Ilengua dels valencians".p.21-22) Sanchis Guarner, a pesar de ser catalanisador, va puntualisar una cosa molt be: als intents d^introduir este nom -catalá- els valencians sempre s'han resistit.

L’equiparacio de llengua i cultura, de llengua i comunitat etnica, de llengua i agrupacio política. está sempre al servici d'ideologies agressores, racistes. Hitler l'utilisà per a l'absorcio de nacions acostades dient: "Si parlen alema son alemans". Dient-ho, invadi un pais que parlava chec. La progressio de passos que es donen es molt clara, i aplicant-los a 1'agressio que patix el valenciá son:
Primer. Que el valenciá siga dialecte del catala. Si aço es conseguix i s'accepta, encara que no ho siga, es passará al segon.

Segon. En Valencia es parla el catala, perque qui parla un dialecte d'una llengua, parla eixa llengua.
Tercer. La cultura de les terres a on es parla catala es cultura catalana, i sempre ho ha segut.
Quart. Tenim, per tant, una gran "nacio" de llengua i cultura catalanes. els "Paíssos Catalans". encara diferenciats, pero...

Quint. Encara falta un atre pas: conseguir que eixos paíssos formen un "Estat", completant-se aixina el proces d'absorcio del "País Valenciá" per la "Gran Nacio Catalana", que es lo que en veritat pretenen.
Com pot vore's, tot este caramull de distorsions i destarifos de concepte no es ciencia. Es 1'unic cami que tenen per a conseguir la finalitat política que pretenen. El problema no es cientific, com volen fer creure. Es absolutament politic. Es fruit de 1'idiologia expansionista del pancatalanisme: es fonamentalisme.

Ho expressa molt be D. Federico Jimenez Losantos en u dels seus "Comentarios Liberales" (ABC. 4/9/94. p.20):

"En cuanto al expansionismo, otra característica del fundamentalismo nacionalista en la vieja Europa, ahí está el irredentismo vasco reclamando Navarra y algún pedazo de la Rioja o Cantabria. algo menos que el pancatalanismo, que aspira a merendarse la Comunidad Valenciana. las Baleares y un par de comarcas aragonesas... "

E1 fonamentalisme que considerem com a un perill molt gran en atres nacions, el tenim aci en representacio ben complida des de fa anys, i 1'estem patint en Valencia. No vore-ho es presbicia. No voler vore que l’accio pancatalanista en Valencia es política, nazista o fonamentalista, es ceguera. No hi ha pijor cego que el que no vol vore.

El dialectisme del valenciá que pretenen está per demostrar. Tan sols está assunit per alguns com a dogma, per a criteri d'autoritat. Notem que el criteri d'autoritat no es cientific, es fonamentalment acientific.

Les opinions de llingüistes professionals son opinions, no son ciencia. Estes opinions arribaran a ser una hipotesis operativa si es fonamenten metodologicament en un tractament valit. Si s'accepten com a veritat indiscutible i inmutable, es convertixen en dogma, es  dir, en anticiencia. No ha hagut cap de tractament metodologicament vafit que fonamente l'afirmacio de que el valencià es dialecte del catala. No aporten raons ni estudi metodolof;ic. Per que no poden.

Pero afirmen eixa opinio, s'extranyen de que no s'accepte, els causa sorpresa de que es pose publicament en dubte, i pareix que s'esgarren les vestimentes com si d'una heregia es tractara: Es que per ad ells es dogmatic, no es pot discutir, no es pot raonar. Es la posicio que está mes Ilunt de la ciencia.

AUSIAS MARCH, CAVALLER I POETA VALENCIÀ (II)




Per Xavier Gimeno Alonso
Extraído de Internet

2.2. El seu nom i llinage
2.2.1 El nom ‘Ausias’
En quan al nom del poeta, segons els critics, pot pronunciar-se de tres maneres diferents: Àusias, Ausías o Ausiàs. Com en l´epoca migeval no s´accentuava i hui el nom ha caigut en desus els estudiosos no han resolt la qüestio, la primera forma n´hi ha pocs que la defenen, quedant-se en les dos ultimes. El filolec Voro López i Verdejo nos diu que entre atres qüestions que apunten a la pronunciacio ‘Ausías’ estan els versos del poeta quan diu: “Yo so aquest que.m dich [Ausías March]”, que fa impossible pronuciar [Ausiàs] i por probable [Àusias], en els documents es troba varies voltes la forma Ausíes, que segon la fonetica valenciana anula per complet la pronunciacio Ausiàs, sent per lo tant la correcta, Ausías.
2.2.2 El llinage ‘March’ (genealogia)
En quan al seu llinage (March), davant el treball exhaustiu i ben documentat del Pare Fullana (Lluïs Fullana i Mira, Benimarfull, Alacant, 1871 – Madrit 1948, gramatic, erudit i religios valencià, academic de la RAE i de la RACV, catedratic de l´Universitat de Valencia) i que fon publicat en el Bolleti de la Societat Castellonenca de Cultura (BSCC), durant els anys 1935 i 1936, sobre la valencianitat d´Ausias March (que durant un temps fon discutida), titulat “Los caballeros de apellido March en Cataluña y Valencia”, intentaré donar una breu resenya d´allo que considere mes important. Rafael Ferreres (Academic de la RAE i catedratic de llengua i lliteratura), tambe fa referencia al treball de Fullana, entre atres, dient que s´ignora la procedencia del llinage March. Per una banda apareix un notari barcelones, Pedro March, sent el primer d´esta familia que n´hi ha documentat, considerant-lo, Amèdèe Pagès, de Barcelona. Fco. Cerdá y Rico en les seues notes “Canto del Turia” diu que els March provenen de la ciutat aragonesa de Jaca. En canvi, Gregorio Mayans diu que el poeta estava emparentat ab el filosof i humaniste valencià, Joan Lluis Vives, per part de sa mare, Blanquina March, per tant hauria de considerar-se de familia d´orige judeu.
Francesc Lliso i Genovés, escriu: “Que consta por los libros del Estamento o estado de Nobles, que la familia March de la ciudad de Valencia es noble, y trae su origen de la ciudad de Jaca en Aragón; que vino al tiempo de la conquista de esta Capital y Reino, en donde asentó su solar y casa, conocido en 1238, y no en Cataluña como se supone en las Obras Poéticas de Ausias March, impresas en Valladolid en 1535 (que es de donde lo hubo de sacar Escolano)”.
Des del temps de la reconquista de Valencia per Jaume I d´Arago, els personages ab llinage March foren molts, tant en Valencia com en Catalunya, aixina com, en Mallorca; està ple de documents referents a cavallers d´este llinage en l´Archiu de la Corona d´Arago (ACA), pero lo que tenim clar es que el primer March que apareix en els documents del ACA, Pere March, I d´eixe nom, (quart agüelo d´Ausias), heretat en Gandia, vila de l´antic Regne de Valencia, al qui Jaume I com a premi als seus servicis li donà unes cases en Gandia i tres jovades (1 jovada = 59 arees) de terra del mateix lloc (Llibre del repartiment, 1249), pot ser considerat com la soca dels atres March, que tant es distinguiren en Valencia, en Catalunya i en l´illa de Mallorca, i per lo tant, el patrimoni dels March, començà en Valencia, en la vila de Gandia, aumentant ab noves propietats en la ciutat de Valencia, en el lloc de Beniarjó, com tambe el Castell d´Aramprunyà (Gavà, Barcelona) i atres bens en Catalunya (sent el mateix que intervingué com a notari public de Barcelona en un acte de casament d´uns princips).
El pare d´Ausias es casà dos voltes, per primera vegada ab Donya Constança (es coneix molt poc de sa primera dona), i tenint tres fills (Jaume, Francesc i Joan); i de la segona dona, en 1379, Leonor de Ripoll, natural de Genovés, filla dels senyors d´eixe lloc, prop de Xàtiva, ab una respectable dot de quarantamil sous en moneda valenciana, tingué dos fills (Peirona, nomenada aixina per ser la primogenita, que fon sordamuda i Ausias, cavaller i poeta). Per tal motiu, Ausias es durà prou anys en sos germans haguts del primer matrimoni de son pare. Son pare deixà a Ausias (1413) el senyoriu de Beniarjo i atres llocs del seu patrimoni, declarant-lo el seu hereu universal. El pare del nostre poeta mori quan es traslladà a la vila de Balaguer (1413) a complir un encarrec del duc de Gandia, llunt de sa terra valenciana i sa familia. Sa mare fon una dona extraordinaria com mes tart es demostrà ab la tutoria dels seus fills.

OCCITANISMO Y CATALANISMO: ELEMENTOS PARA UNA COMPARACIÓN CON ESPECIAL REFERENCIA AL PROVENZAL Y AL VALENCIANO (IV)




            
               
                Philippe Blanchet
               Profesor de Sociolinguística, Universidad de Rennes 2, Alta Bretaña, Francia
                Director del Centre de Recherche sur la Diversité Linguistique de la Francophonie

Maniobras políticas

                Arrojemos una buena luz aquí sobre los tres ejes fundamentales de las maniobras políticas occitanistas.
(i)                  Uno de los más importantes está arraigado en la oposición sistemática a los intelectuales provenzales y promotores de la lengua (incluyendo las asociaciones),  la oposición al renacimiento provenzal a partir del siglo XIX, y las características relacionadas (ortografía, escritos, normas lingüísticas, actividades...), y lo que es más, a  la  lengua Provenzal y a las propias identidades. Evidencia de ello se puede encontrar ya en Lafont 1954, que comenzó a difundir la visión de un Mistral que se suponía que era “conservador” y con mucho menos talento de lo que normalmente se cree, con el fin de deshacerse de este antepasado embarazoso (véase también Lafont 1971ª: 137; Armengaud y Lafont 1979: 775; un buen resumen de las posiciones anti Mistral en Bayle 1975: 137-139). La seria y objetiva biografía de Mistral hecha por Mauron (1993) ha corregido esto mucho después. En una escala más amplia, la famosa organización de Mistral, el Félibrige, fue constantemente atacada y acusada de no ser más que un grupo de burgueses tradicionalistas (Lafont 1971ª: 137-151; Pasquini 2001; un resumen en Barthès 1988: 415-416) cuya lengua y acciones fueron presentadas como cada vez más distantes del pueblo (Garavini 1970: 144; Pasquini 1986: 109-110 y Pasquini 2001). Se dijo que habían elegido su propio dialecto “inferior” provenzal local, muy influidos por los franceses, para convertirlo en la norma de referencia para toda la Lengua de Oc, y su sistema ortográfico se presentó como una mera adaptación del francés, por tanto imposible de aplicar a cualquier otro dialecto (e. g. Bec 1983: 107; Pasquini 2001; Kremnitz 2001: 30-31). Del propio Mistral, porque su gloria podía ser útil, se dijo que había preferido una especie de ortografía occitanista primero y haber sido obligado a adoptar este otro sistema por su maestro Roumanille (Lafont 1972b: 18; Armengaud y Lafont 1979: 884; Kremnitz 2001: 30; véanse las correcciones en Barthès 1987: 201-205 y Mauron 1993: 104-105).
                El mero hecho de sentirse “provenzal” y no “occitano” se señalaba como una traición que era resultado de la “ruptura” de la unidad occitana por parte de los franceses... (e.g. la última palabra de Lafont en Boyer y Gardy 2001: 468). La minimización de la posición de la lengua provenzal, la ortografía y la fuerza cultural también ha sido una estrategia constante occitanista. Sibille (2000: 36) escribe que “Una fracción radical de los movimientos provenzalistas se niegan al consenso [con los movimientos occitanistas] y sigue manteniendo la polémica sobre estas cuestiones”. La llamada “fracción” resulta ser una gran mayoría, de hecho (véase Blanchet 2002a). Lafont (1972b: 5 y 20) afirma que la reforma ortográfica occitanista “ha tenido éxito atrayendo a los nuevos escritores provenzales (...) cuya mayoría tienen menos de cincuenta años”. Suele ser un argumento habitual por parte de los occitanists, el deseo de aparecer “modernos y triunfantes”, pero esto no reside en datos básicos: por el contrario, cuando se recogen datos objetivos, se revela que hasta el 90 por ciento de las asociaciones provenzales en funcionamiento en 1990 y el 95 por ciento de los escritores contemporáneos provenzales (incluyendo a los más jóvenes) han elegido la ortografía provenzal “mistraliana” (Blanchet 2002ª: 16-20 y 117). Además, algunos de los escritores raros y famosos que utilizaban la ortografía occitana acabaron por volver a la “mistraliana” (e. g. S. Bec 1980).
                Muchos estudios rigurosos (a menudo recientes) han demostrado que casi todo esto es erróneo (véase Barthès 1987; Duchêne 1982 y 1986; Mauron 1993; Calamel y Javel 2002;  resúmenes en Blanchet 1992 y 2002a). Esta estrategia de estigmatización se explica por dos razones principales:
(a)                Mistral y su Félibrige eran tan famosos que fue necesario desestabilizarlos con el fin de sustituirlos;
(b)                la “excepción” provenzal, con su ya adoptado sistema ortográfico, sus diccionarios y libros de gramática, sus famosos escritores, su red de asociaciones (aunque no relacionadas con el Félibrige), su fuerte sentido de identidad regional junto con su total aceptación de su lado francés, y sus originales principios de política lingüística,  constituyeron –y siguen constituyendo- el principal obstáculo a la propaganda y acción occitanista.

(ii) Otra maniobra política occitanista importante se puede observar en sus discursos sobre partidos políticos y sus enlaces con la Administración. Por diversas razones, incluyendo su estrategia activa y sus visiones centralistas, los partidarios occitanos siempre han tenido éxito para ser oídos por la Administración central francesa en París. Concurrente con la famosa “Ley Deixonne” de 1951 (sustituida ahora por otro texto) que permitió enseñar “dialectos locales” en las escuelas francesas, el propio nombre de Occitano se utilizó por vez primera: el nuevo Institut d’Etudes Occitanes (IEO) se presentó a sí mismo como “nacido de la Resistencia” y luego presentó a los otros movimientos –principalmente el Félibrige provenzal- como una organización conservadora culpable de haber “colaborado” más o menos con el régimen de Pétain en Vichy y, por tanto, con los nazis (pero véanse “los cadáveres en los armarios” más adelante). Esta tendencia a acusar a cualquier persona u organización contradictoria de estar “aliada con las ideologías y partidos políticos de extrema derecha” siempre ha sido muy utilizada por los occitanistas (y difundida, véase Ager 1990). Lafont y Armengaud (1979: 865) sostienen que al oponerse a Félibrige, el IEO se opone “a los nostálgicos del régimen de Vichy”. Añaden (1979:868 y 901) que “Fueron impartidos cursos de occitano por miembros de Félibrige a los agentes alemanes de los servicios de seguridad”, sin ninguna prueba en absoluto de esta afirmación, naturalmente. Regularmente aparece la misma clase de acusación: Sumien (2000: 6) menciona un”breve y misterioso período en que Mistral perteneció a la Acción Francesa” (el partido nacionalista de derechas de Maurras que apoyó a Pétain), lo que es completamente falso. En 1988, cuando organizaba su festival anual en Gap, el importante movimiento provenzal llamado Unioun Prouvençalo tuvo que dar un comunicado: fue acusado públicamente por parte de militantes occitanistas de estar relacionado con el Frente Nacional (un partido francés fascista), lo que es también una completa falsedad.

EL "PAIS VALENCIÀ DELS RETORETS ZOMBIS




Per María Teresa Puerto Ferre

Alguns  “retorets” progres del seguidisme catalanero tenen  l´arrogant osadia no sols d´exhibir la seua evident ignorancia historica sino també de vanagloriar-se  d´haver segut algu dels “acunyadors” de la poblerina denominacio “país valencià”  per a l´inveterat i historic Regne de Valencia. 
Eixe apodo denominatiu podría ser entendible en aquella iletrada esquerra fusteriana dels anys ´60 i ´70 que no tenia internet i mai llegia un llibre. Pero es impensable en la voragine informativa dels anys 2010 a on  el que no vol llegir  archius originals i documentar-se adequadament, es perque preferix ser un terros de la historia.
Tal es el cas, pareix ser, d´eixe “modelno” retoret de Novelda, un tal Javier Muñoz-Pellin que va presumint estos dies , en prensa local,  de la seua genial i poblerína contribucio a la difusio de lo que sempre va ser  pura barbarie denominativa: lo de “pais valencia” (LVemv.21.10.2010) Conten les croniques que els historiadors catalans sempre van patir un agut complex d´inferioritat respecte al Regne de Valencia perque Catalunya mai va ser un regne i no ha existit mai ni un sol document historic a on  es parle de la mes mínima intencio dels Reis d´Aragó  de canviar la seua historica condicio de “comtats de la Marca Hispanica”.
D´eixe inconfessable complex d´inferioritat catala, ha participat sempre  la nostra iletrada  esquerra deslleal. I en el seu rendit  vassallage a la burgesia del nort, es va inventar el barbarisme històric "país valencia”, una denominació geografica creada per a insultar als valencians.

La paraula "país", com be definix l´academic Antonio Capmany i de Montpalau: "A on no hi ha nacio, no hi ha patria: perque la paraula “PAYS” no es mes que terra que sustenta persones i besties al mateix temps" (“Sentinela contra els francesos”. Gómez Fuentenebreo. Madrid.1808). Pur concepte terruno. Pel qual es pot afirmar, en absoluta rotunditat, que el toponim "país valencia " MAI ha existit legalment com denominació propia d´una zona geografica ni, molt manco, com denominacio d´un ens polític per a referir-se a Valencia.
Va ser pur invent d´aiatolàs fusterians en estat d´ebri deliri i el seu intent de colar-ho ,sense valor jurídic, en el preambul del Real Decret Llei  de preautonomia de la Comunitat Valenciana  17 de març de 1978: una fechoría de  l´esquerra. L´única identitat historica que se´ns pot aplicar legítimament es el de Regne de Valencia, denominacio molt anterior a la conquista de Jaume I. El "Regnum Valentiae" existia ya quan el rei de Castella, Alfons VIII, el de les Naves de Tolosa, va firmar el famos Tractat de Cazorla en Alfons II d´Aragó, (iaio del Conquistador), el 14 de desembre de 1179.
En eixe Tractat es delimitaven les terres a conquistar per cada u d´ells o dels seus successors.
A  partir de la conquista del “cap i casal”  en el segle XIII, el Regne de Valencia va ser jurídicament reestructurat en noves normes que li van convertir en un Estat de Dret totalment autonom, en els seus organismes legislatius, judicial i executiu, regit pels seus propis furs i privilegis i formant el seu propi "Corpus juris" fins que, quasi mig milenni després i per un acte de força, fora abolida la seua legislacio per un príncep estranger en 1707: Felip V.
Pero ni tan sols eixe mateix príncep, que va regnar en el nom de Felip V, va suprimir el nom Regne de Valencia que va continuar existint com a demarcacio administrativa. Tant Felip V com els seus successors es van titular en la seua diplomatica "Rei de Valencia" i no es coneix cap documentacio en que el poder constituït declare taxativament extingit el Regne de Valencia.
Inclus en la divisio d´Espanya en províncies per Javier de Burgos en 1833 el Regne de Valencia va ser dividit en tres parts pero, així i tot, els seus municipis no van ser, en absolut, atribuïts a demarcacions foranes. Van permaneixer afiliats al Regne de Valencia. I replets estan les estanteries de l´Archiu Històric Nacional, de l´Archiu de la Corona d´Aragó i, en especial, els de l´Archiu del Regne de Valencia de documentacio que certifica la identitat historica del nostre territori i la seua antiga classica “denominació d´origen": REGNE de VALENCIA.
Replets sí, pero ni llegits ni consultats per retorets zombis del pataterisme històric que viuen en el "país" de la Capucheta Roja.